Durante este mes de agosto, hemos dedicado nuestros post a compartiros información acerca del autocuidado y sus beneficios, desde el autocuidado físico hasta el autocuidado mental. En el artículo de hoy os hablaremos como ambas partes se integran de forma holística, repercutiendo en los dos aspectos claves de nuestro ser: el cuerpo y la mente.
¿En qué consiste el autocuidado holístico?
Llamamos autocuidado holístico o autocuidado integral al autocuidado que integra tanto el autocuidado del cuerpo y el autocuidado emocional. El autocuidado holístico se inicia al tomar de conciencia de que el cuerpo y la mente integran un solo ser y que este está plenamente conectado en todos sus aspectos.
Descubrir las relaciones que existen entre el cuidado que damos a nuestro cuerpo y los estados emocionales que transitamos nos proporcionará alegría y vitalidad durante nuestras rutinas diarias. Así mismo, cuidar nuestras emociones y la relación que tenemos con nosotros mismos y con los demás, evitará las afecciones psicosomáticas y que nos agotemos, tanto psicologicamente como mentalmente.
¿Cómo nos autocuidamos de manera holística?
Las rutinas de autocuidado del cuerpo y de la mente que hemos descrito en los post anteriores repercuten de manera holística en nuestro ser. Debemos ser conscientes de estas interrelaciones para sacar el máximo provecho de ellas y para aplicar sus ventajas a nuestro caso particular.
Ya hemos mencionado que los hábitos de descanso y de actividad física, de llevar una dieta saludable y de establecer relaciones afectivas sanas con nosotros y con nuestro prójimo presenta ventajas a nivel físico y mental pero ¿cómo reconozco las ventajas holísticas de estos autocuidados?
La vitalidad física, la paz mental y el buen humor son las pruebas directas de que estamos autocuidándonos de manera holística. Si prolongamos estos cuidados en el tiempo también evitaremos problemas de salud.
Otros factores que influyen en el autocuidado holístico
Ya hemos mencionado que establecer rutinas sanas resulta primordial para nuestro autocuidado integral y para nuestro bienestar. A estas acciones podemos incorporar otros momentos de dedicación a nosotros mismos, los cuales destacamos a continuación:
- Destina algo de tu tiempo al ocio. El tiempo de ocio resulta fundamental para relajar la mente y para estimular la creatividad.
- Mantén el contacto con la naturaleza. La naturaleza tiene un poder indescriptible capaz de hacernos entrar en estados pseudomeditativos de manera espontánea, además nos proporciona aire puro y es un muy buen lugar para realizar ejercicio físico. ¡Aprovecha sus ventajas!
- No te olvides de disfrutar. No veas estas rutinas como deberes que hay que cumplir, busca la manera de disfrutar de ellas: baila en la naturaleza, cocina sano pero cocina rico, pasa tiempo con tus personas favoritas…
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