¡Llegan las vacaciones y en vez de disfrutar nos estresamos porque queremos hacer demasiadas cosas! ¿Te ha pasado alguna vez? ¡Tranquilo! Este fenómeno es más frecuente de lo que parece.

A menudo queremos aprovechar demasiado el tiempo en vacaciones, planeamos muchas actividades que nos deberían conducir al disfrute pero en su lugar nos estresan. A continuación te damos algunos consejos para que no te ocurra, unos tips básicos que te ayudarán a conectar cuerpo y mente con el presente de una manera sencilla y alegre.

Reduce tus expectativas

El tiempo dedicado a las vacaciones es tiempo bien invertido, sobre todo si pasamos el resto del año trabajando y embebidos en la rutina diaria.

Descansar, pasar tiempo con la familia y los amigos o disfrutar de la naturaleza son actividades fáciles de llevar a cabo que calman la mente y relajan el cuerpo. No necesitas planificar grandes eventos que al final conllevan a estrés: organiza pequeñas reuniones, excursiones a lugares cercanos que todavía no conoces, escapadas de un par de días…

Desconecta totalmente del plano laboral, no intentes adelantar trabajo ni resolver cuestiones que quedaron pendientes.

Di no al exceso de planificación

Tanto si te quedas en tu lugar de residencia habitual como si tienes la suerte de hacer una estancia vacacional en otro sitio, no planifiques en exceso tus actividades diarias.

Programando demasiado el cómo deben transcurrir las vacaciones volveremos a elevar las expectativas y ello conduce a estrés. Concédete el lujo de preguntarte qué es lo que te apetece realmente hacer, y organízalo desde la calma y el disfrute.

Sé flexible ante las eventualidades que puedan surgir y que están fuera de tu control, también forman parte de tus vacaciones!

Mantén tu mente en el presente

Mantener tu mente en el presente es la verdadera clave para liberarte del estrés, tanto en vacaciones como durante la rutina diaria. Incluso, diversos maestros de meditación coinciden en que mantener la mente en el presente mientras estás realizando alguna actividad sencilla conduce a la mente a un estado leve de meditación.

No hacer proyecciones hacia el futuro y mantener la concentración en la tarea que estamos realizando calma la mente y ejercita el cerebro.

Conecta con tu cuerpo

Aprovecha las vacaciones para reestablecer el diálogo interior con tu cuerpo. No olvides que tu cuerpo es tu amigo y tiene muchas cosas que decirte.

Permanece atento a las señales que te envía, mímalo y nútrelo con alimentos que le sienten bien. Te recomendamos que investigues y practiques la respiración consciente, también que realices algún tipo de ejercicio que te ayude a sentir las partes de tu cuerpo, ya sea baile, yoga o simples estiramientos.

Conectar con tu cuerpo desde el disfrute y la respiración consciente previene la ansiedad y el estrés.

¿Te ha parecido útil esta información?

Esperamos que este contenido te haya resultado interesante y que nuestros consejos te ayuden a disfrutar de unas vacaciones conscientes y libres de estrés.

En Bioevolución trabajamos compartiendo información continuamente acerca de cómo lograr una mentalidad abundante, consciente y amorosa para todos nuestros lectores. También difundimos las actividades de nuestros terapeutas que ayudan a las personas a lograrla, consulta más acerca de ellos en este enlace.

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